México en el contexto de la Sociedad de la Información y el Conocimiento

México es un país con más de 103 millones de habitantes.  Si se analizan las tendencias de crecimiento podríamos afirmar que seremos alrededor de 119 millones de mexicanos para el año 2015.  En consecuencia, una de las necesidades principales de nuestros tiempos es la inserción automática en diversos procesos informativos relacionados con nuestras actividades diarias, como sería: la educación y el aprendizaje, los servicios de salud, la economía y el comercio, así como nuestra relación con las autoridades gubernamentales, por mencionar las más relevantes.


De forma similar, en el resto del mundo se está gestando el mismo fenómeno integrador. Este se ha intensificado a partir de la evolución de las nuevas herramientas de información y comunicación, que han cambiado por completo el concepto geográfico del mundo entero, al ofrecer información, acortar distancias y generar nuevos servicios, con un impacto directo en la vida de quienes hacen uso de estos servicios alrededor del mundo.


Hace apenas algunos años, se acuñó en Europa el término que describe la nueva forma en que la sociedad en general, sin percibirlo, se ha venido desarrollando al crear y difundir información para todo el mundo a través de las TIC.  Nos referimos a la Sociedad de la Información y el Conocimiento (SIC).


La SIC utiliza fundamentalmente la tecnología digital como medio básico de comunicación entre los individuos, comunidades, empresas, sociedades y países.  La tecnología digital funciona mediante el proceso de codificación de flujos de información ya sea en forma de textos, sonidos, voz, imágenes u otros medios.


Este concepto de “Sociedad de la Información y el Conocimiento” es un proceso natural que deriva del avance tecnológico, como tendencia dinámica y creciente a la cual se está integrando todo el mundo.  México no puede quedarse a la zaga de este proceso que se difunde a grandes pasos, y que incluso la Organización de las Naciones Unidas está promoviendo con gran prioridad.


Para explicar mejor este término, se puede resumir que la SIC obedece a la nueva estructura y organización mundial en los aspectos sociales, económicos y políticos. En el marco de XII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno (Bávaro, República Dominicana; noviembre de 2002) se encuentra la “Declaración de Bávaro”, que incluye una definición más formal de esta tendencia mundial:

“La Sociedad de la Información es un sistema económico y social donde el conocimiento y la información constituyen fuentes fundamentales de bienestar y progreso, representa una oportunidad para nuestros países y sociedades, si entendemos que el desarrollo de ella en un contexto tanto global como local requiere profundizar principios fundamentales tales como el respeto a los derechos humanos dentro del contexto más amplio de los derechos fundamentales, la democracia, la protección del medio ambiente, el fomento de la paz, el derecho al desarrollo, las libertades fundamentales, el progreso económico y la equidad social...”

Lo anterior significa que los procesos tradicionales para: aprender, educarnos, conocer, comerciar, tramitar, preguntar, entre otros, se están transformando drásticamente a una velocidad sorprendente. En otras palabras, ahora nos comunicamos e intercomunicamos más ágil, efectiva y oportunamente.  Todo lo anterior, se debe fundamentalmente al progreso de las herramientas digitales y los sistemas de información.

El mismo proceso de globalización que se vive a nivel internacional, ha sido fomentado por las nuevas tecnologías de información, ya que han permitido el enlace automático a miles de personas y el acceso a una cantidad ilimitada de información en prácticamente cualquier parte del mundo.

Sin embargo, no todas las sociedades inmersas en este proceso han podido evolucionar con la misma velocidad por motivos culturales, sociales y principalmente por razones económicas. Transitar hacia la SIC exige una infraestructura organizada por plataformas de servicios digitales, que requieren necesariamente de una inversión relevante.

A la diferencia entre los individuos que tienen la oportunidad de tener acceso a la información mediante los medios electrónicos y los que no la tienen se le ha llamado la Brecha Digital.


En México y en diversos países como el nuestro, existen Observatorios de la Sociedad de la Información como un elemento integrador de experiencias; ya sea en materia de esfuerzos y avances tecnológicos, como en participación de dependencias de gobiernos locales, estatales y federal, cámaras y asociaciones, sector educativo y sociedad civil en su conjunto, como un punto de referencia con otros países.


Las tecnologías de la información y la comunicación habilitan el acceso igualitario a las diversas plataformas de servicios digitales y nos brindan la oportunidad de aprender más, educarnos mejor, tener mejor salud, sumarnos a la nueva economía, tener mayor comunicación con las autoridades y, en pocas palabras, ser mejores individuos y ciudadanos.

 

Actualizada al 27/Aug/2010, 18:31